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¿Algún rival? Si, el que durante un tiempo fue el eterno sedán más rápido de todos, el BMW M5. Mientras el V8 Biturbo del Terminator Alemán alcanza los 100 km/h en 4,3 segundos, el Charger Hellcat lo hace en 3,9. El cuarto de milla queda justo en los 11 segundos, el tiempo de un Dodge Viper o de un Corvette ZR1. Y como buen muscle car, solo estará disponible con tracción trasera, claro que en lugar de las clásicas automáticas de 4 velocidades, ahora puedes encontrar una sofisticada transmisión de 8 velocidades, la que hace cambios en 160 milisegundos y con sistema Revmatching a la hora de bajar marchas, para aprovechar al máximo la banda de torque.
Los upgrades realizados al Challenger, también los puedes encontrar acá, como neumáticos Pirelli de mayor agarre y frenos Brembo de mayor diámetro. Otros elementos comprenden dos llaves, una para habilitar al motor completo y otra que limita la potencia a 500 caballos. Además cuenta con un modo «Valet Parking» que limita completamente la capacidad mecánica del auto cosa que ningún estacionador salga a hacer de Toretto con auto ajeno. Su sistema multimedia no solo es muy completo, sino que además permite monitorear todos los elementos vitales del auto y los parámetros de potencia y torque de este en tiempo real.
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