Porque no existe Mini sin el toque de John Cooper Works, por fin se hace oficial la versión tope de línea del pequeño inglés. Y como puedes suponer, es el más veloz de todos. Para que vayamos al grano, el Cooper JCW viene impulsado por un corazón de 2 litros Turbo, el que entrega 228 caballos de fuerza entre las 5200 y 6000 RPM, con un torque de 320 Nm generosamente distribuido entre las 1250 y las 4800 RPM. Para que se hagan una idea son 20 caballos más y 40 Nm de torque extra sobre el 1.6 al que reemplaza.
Para acelerar como ningún otro, se equipa con una caja manual de 6 velocidades manual, con el que puedes alcanzar los 100 km/h en 6.1 segundos. Por otro lado, si ya te olvidaste de las mecánicas, siempre podrás escoger una Steptronic automática de 6 velocidades, que es más rápida.
Para hacer que el JCW se comporte como el kart que es, se equipa con un nuevo kit deportivo de frenos Brembo, una dirección electromecánica revisada y los típicos controles de tracción y estabilidad como el DSC (Dynamic Stability Control), DTC (Dynamic Traction Control), DDC (Dynamic Damper Control) y diferencial de bloqueo electrónico.
En el lado estético, las mejoras son más sabrosas que en el modelo que reemplaza. Muchos notaran los parachoques más esculpidos y con tomas de aire más prominentes, o las preciosas butacas deportivas, además de llantas de aleación en 17» o 18»
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