Diputados chilenos se suben el sueldo por alzas de combustibles

Se demoran un siglo en aprobar leyes para subir el sueldo mínimo, aprehender definitivamente a criminales o reestudiar las leyes de tránsito, pero llegada la hora de «subirse el sueldo» lo hacen en un dos por tres. Es de estos casos que sólo suceden en Chile y donde se demuestra una vez más el descaro […]

Se demoran un siglo en aprobar leyes para subir el sueldo mínimo, aprehender definitivamente a criminales o reestudiar las leyes de tránsito, pero llegada la hora de «subirse el sueldo» lo hacen en un dos por tres.

Es de estos casos que sólo suceden en Chile y donde se demuestra una vez más el descaro ante quienes se esfuerzan por un sueldo mínimo que como gran cosa se incrementó en un 10,4%.

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Como «justo» calificó el diputado de la Democracia Cristiana Gonzalo Duarte el aumento de $100 mil destinado al gasto de bencinas, aprobado por unanimidad hace tres semana por la comisión de Régimen Interno de la Cámara.

La instancia la integran los jefes y subjefes de bancadas y la mesa de los diputados, y su decisión obedece al aumento de precios que han experimentado los combustibles en el último tiempo.

«No había sido reajustado hace cuatro años (el item), ha tenido un incremento extraordinariamente pequeño en comparación a lo que ha sido el precio del combustible», argumentó el DC, quien lo estimó «justo».

Duarte, además, aseguró que la anterior asignación «ni siquiera cubre parte» del alza del combustible, según radio Cooperativa.

La medida comenzó a regir durante agosto y supone dicho aumento para cada parlamentario, que hasta julio recibía $ 771 mil mensuales. Ahora, cada diputado dispondrá del dinero equivalente a 1.460 litros de bencina, según consigna el link de Transparencia y Control Ciudadano de la página web de la Cámara.

Señores Diputados: JUSTO es que a todos los chilenos nos den ese bono porque el alza de los combustibles es algo que nos afecta a todos, no sólo a los Diputados.

fuente: La Tercera

“Soy un amante de los autos casi por genética y con el tiempo he aprendido de mis amigos mecánicos a desenvolverme humildemente en el mundo de los fierros. En los autos encuentro el relajo y tranquilidad que a veces se pierde con la rutina del día a día”.