Me compré un Ford GT40 este fin de semana… ¡Y me costó 11 millones de dólares!

El pasado fin de semana se batió el récord del auto estadounidense más caro de la historia vendido en un remate. Fue en Pebble Beach, en California, en la exposición de autos clásicos (Concurs d’ Elegance) que se realiza anualmente en esta localidad en la costa oeste de Estados Unidos. Y en Pebble Beach las […]


El pasado fin de semana se batió el récord del auto estadounidense más caro de la historia vendido en un remate. Fue en Pebble Beach, en California, en la exposición de autos clásicos (Concurs d’ Elegance) que se realiza anualmente en esta localidad en la costa oeste de Estados Unidos. Y en Pebble Beach las cosas son serias: 11 millones de dólares fue el precio que batió el récord en el remate, luego te podrás imaginar que no bastaba con sacar un par de lucas del cajero automático para comprarse el auto. Pero a pesar del precio, su dueño puede considerarse un afortunado: Adquirió un Ford GT40 de 1968, pero no cualquier GT40 de 1968, sino que uno que fue utilizado por Steve McQueen y su grupo de producción en la película «Le Mans».

¿Por qué tan caro? De partida, los Ford GT40 de carreras originales son escasos. Este que fue vendido por la cadena de remates RM Auction en Monterey, compitió en las temporadas de 1968 y 1969 principalmente en pistas europeas con el piloto David Hobbs. Estaba pintado en los clásicos colores naranjo y celeste del equipo Gulf/Mirage y aunque solo logró una victoria (Monza, 1968), su mejor momento estaba por venir cuando dejara de ser auto de carreras. El GT40 rematado se convirtió en el auto que ayudó a grabar las escenas de velocidad (es decir, casi todas) de la película Le Mans, estrenada por Steve McQueen en 1971. McQueen y su producción modificaron este GT40 para montar cámaras y equipamiento de audio que permitiera grabar escenas a alta velocidad: Qué mejor que un auto de carreras para grabar escenas de una lucha en pista. Para esto, le cortaron el techo y modificaron la carrocería. Dicen que era muy difícil manejar este auto a alta velocidad, lo que hacía muy peligrosa la grabación, sin embargo, al ver las escenas de «Le Mans» nos damos cuenta de que valió totalmente la pena. La película no fue demasiado exitosa en los cines, pero se ha vuelto un elemento de culto entre los fanáticos tuerca con el pasar de los años. Y como todo lo que tocó McQueen ha adquirido esa misma característica de considerarse objeto de culto, el precio no es para nada inexplicable.

Este es el Ford GT40 que RM Auctions remató en Monterey, California esta semana. (Imagen: RM Auctions)

Años más tarde, este GT40 fue readaptado a su configuración original de purasangre, que es la configuración que su nuevo dueño recibió el sábado.

El récord lo tenía hasta ahora un espectacular Duesenberg de 1931 con un precio de venta de 10,34 millones de dólares.

Más Información: Datos del GT40 en RM Auctions

Editor Área Motorsport Sigo el automovilismo desde los cuatro años. Es un deporte que nunca deja de sorprenderme, y que me gusta porque mezcla tanto la destreza y estrategia de los pilotos y equipos con la mecánica y tecnología de los automóviles. Me puedes encontrar en Twitter hablando sobre autos como @felipegana