F1: Gran Premio de España, la carrera no termina hasta la última vuelta

Hasta hace el año pasado, la Fórmula 1 -para los menos fanáticos- era una serie de carreras un tanto aburridas, donde habían muy pocas opciones de sobrepasos en carrera y hasta antes de la primera «era Schumacher», ganaban siempre los mismos. Por lo mismo, en su afán por hacer más atractiva la categoría, la FIA […]

Mark Webber ganó en el GP de España

Mark Webber ganó en el GP de España

Hasta hace el año pasado, la Fórmula 1 -para los menos fanáticos- era una serie de carreras un tanto aburridas, donde habían muy pocas opciones de sobrepasos en carrera y hasta antes de la primera «era Schumacher», ganaban siempre los mismos. Por lo mismo, en su afán por hacer más atractiva la categoría, la FIA implementó una serie de cambios en virtud de reducir los costos a los equipos y lograr un mayor espectáculo.

Para la temporada 2010, el cambio más siginificativo y rupturista vino de la mano de los repostajes de combustible, los cuales se prohibieron durante el desarrollo de la carrera, dejando en manos del equipo de pits solamente el cambio de neumáticos y alguna que otra reparación mecánica.

Este cambio no ha sido menos importante, pues los monoplazas deben largar muy pesados con sus tanques de combustible llenos y conforme avanza la carrera van perdiendo peso y logrando un mejor desempeño en pista. Y es por esta razón que la temporada 2010 de la Fórmula 1 tiende a hacerse más entretenida durante las últimas vueltas de la carrera donde todo puede suceder.

Así fue durante el Gran Premio de España, que lo comentamos tras el salto.

El día sábado luego de la clasificación, la cosa se veía clara para RedBull con sus dos «toros» en la primer línea de la grilla y con la quinta pole position al hilo, los que dominaron durante gran parte de la carrera con Lewis Hamilton de McLaren como el único capaz de seguirles el ritmo.

Más atrás Fernando Alonso de Ferrari y el Mercedes de Michael Schumacher sólo por nombrar algunos en una posición de privilegio para ver lo que hasta el momento sería un aplastante 1-2 de la escudería de la bebida energética.

Pero hacia el final de la carrera todo comenzó a variar, haciendose más estrechas las luchas por las posiciones y por un desafortunado problema técnico en los frenos del alemán Sebastian Vettel de RedBull, lo que le obligó a «pasear» por el circuito sin poder pisar el acelerador a fondo cayendo de la segunda a la cuarta posición. Hasta ahí Webber (RedBull) seguía sólido en la punta seguido de Hamilton (McLaren) y Fernando Alonso de Ferrari quien hasta antes del incidente corría en el cuarto puesto sin imaginar un podio en el gran premio de su país natal.

Luego en la vuelta 64 de las 66 totales, el piloto británico Lewis Hamilton, perdió el control de su McLaren debido un problema en su neumático delantero izquierdo, al parecer ocasionado por una piedra qe se incrustó entre la llanta y el neumático provocando la explosión de este último y dejando a Hamilton contra los neumáticos de la curva tres.

Con el problema mecánico de Vettel y el accidente de Hamilton, Fernando Alonso y su Ferrari se encontraron por sorpresa con una segunda posición que no imaginaron durante toda la carrera, conformando un podio entre Mark Webber quien dominó toda la carrera y Sebastian Vettel quien de ser el «niño maravilla» de la temporada pasada ha psadao a ser el «niño mala suerte» en este 2010.

Finalmente la conclusión es una sola: Las carreras -y sobre todo las de la Fórmula 1 durante el 2010- no se terminan hasta que todos pasan por la línea de meta. En las últimas vueltas todo puede suceder.

“Soy un amante de los autos casi por genética y con el tiempo he aprendido de mis amigos mecánicos a desenvolverme humildemente en el mundo de los fierros. En los autos encuentro el relajo y tranquilidad que a veces se pierde con la rutina del día a día”.