La granja abandonada con autos clásicos en su interior

Mito urbano o historia real, lo cierto es que se dice que un jubilado neoyorkino adquirió una granja en Portugal que llevaba más de quince años abandona luego de que sus propietarios sin descendencia fallecieran. La granja poseía un gran granero que se encontraba cerrado al momento de su venta con los portones de acero […]

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Mito urbano o historia real, lo cierto es que se dice que un jubilado neoyorkino adquirió una granja en Portugal que llevaba más de quince años abandona luego de que sus propietarios sin descendencia fallecieran.

La granja poseía un gran granero que se encontraba cerrado al momento de su venta con los portones de acero soldados.

Una vez adquirida la propiedad el jubilado estadounidense decidió abrir el viejo granero y tal fue su sorpresa al encontrarse con lo que te mostramos tras el salto.

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Una completísima colección de clásicos en estado de abandono, donde el paso del tiempo y el polvo han dejado huella.

Entre los modelos se cuentan descapotables como el Fiat 1200 y Fiat 1500, el Ford Cortina II o los Mercedes 180, además de un Opel GT del 68, un Lotus Elan FHC o un Lotus Super Seven.

Dos coupés deportivos de época como el Porsche 356 y Austin Healy Sprite, a los que se suman un Ford Y y un Volvo PV 544, junto a los clásicos italianos Alfa Romeo Giulietta y Giulietta SS.

Lotus Europa, Lancia Flamina, Abarth 1300 Scorpione, Peugeot 504 cabriolet, Peugeot 404 cabriolet, Mini, Alfa Romeo 1900 Super Sprint, Fiat 508 Balilla cabriolet, Fiat Topolino, Peugeot 202 y Triumph TR4 completan la lista además de algunos modelos de competición.

Claramente, si la historia es cierta, el gringo se ha ganado la lotería y la granja pasó a segundo plano.

“Soy un amante de los autos casi por genética y con el tiempo he aprendido de mis amigos mecánicos a desenvolverme humildemente en el mundo de los fierros. En los autos encuentro el relajo y tranquilidad que a veces se pierde con la rutina del día a día”.