Ramiro Scuncio, a un año

Hoy es un día negro para el automovilismo chileno. Hoy se recuerda el primer aniversario del fallecimiento de Ramiro Scuncio Moro.

Exactamente hace un año falleció “Rami” saliendo de su casa a buscar a sus hermanos al Colegio.

Ramiro nació el 27 de junio en Bahía Blanca, Argentina. Hijo de Alberto Scuncio y Virginia Moro. Es el mayor los hijos. Lo siguen  hermanos Martín y Javier Scuncio Moro.

Sus inicios en el automovilismo fueron desde muy niño. Su padre, el empresario Alberto Scuncio siempre ha tenido el sueño de tener a unos de sus tres hijos en la Fórmula 1 y empezó a trabajar para ello.

“Rami” empezó su carrera deportiva en el Karting en 1995 en un karting para correr en la tierra, corrió en el kartodormo de su natal Bahía Blanca. Salió subcampeón 2 veces. Perdió los dos campeonatos por 1 punto y el otro por 3. Después compitió en la Comer 100. Ahí logró el campeonato 2 carreras antes. Después se vino vivir a Chile. Corrió en la categoría Junior en Concepción, ahí salió 2 veces campeón y después se fue a correr a la Sudam C a Santiago, donde ganó una carrera y un par de series.

En 2005, debutó en la F3 chilena, donde logró un triunfo en San Antonio y obtuvo el cuarto lugar en el campeonato de pilotos con 88 puntos y una carrera no corrida (la última).

En 2006, fue apadrinado por Eliseo Salazar, quien lo llevó a la Star Mazda Series, donde corrió carreras en Estados Unidos y Canadá. No pudo terminar la temporada y corrió algunas carreras de la Fórmula 3 chilena.

En 2007, nuevamente se va al extranjero, esta vez a la Fórmula Renault Argentina, nuevamente no puede completar una temporada en el extranjero y vuelve a Chile.

El año pasado, junto a su padre y hermano, forman el “Scuncio Pro Racing”, un equipo para correr en la F3. Los triunfos no demoran en llegar. El 18 de mayo, en San Rafael Mendoza, tercera fecha del campeonato de la F3, logra su último triunfo, nada más ni nada menos que en su querida Argentina.

El 29 de mayo nos deja físicamente, pero sigue vivo en nuestros corazones y recuerdos.

Hasta siempre Ramiro!!!!