¿Es posible crear una «aspiradora» de Smog?

El parque automotriz está creciendo a pasos desmedidos. Es complicado para un medio de comunicación que se dedica a hablar de automovilismo e industria motor, hablar estos temas, porque para muchos les sonará a una ironía; a que nosotros somos los que ayudamos a que la gente compre más autos. Y no se trata de eso.

¿Si usted tiene un auto que esta bueno, para que lo va a cambiar? Siempre hay repuestos y talleres buenos. ¿Es necesario que cada integrante de su familia tenga un auto? ¿Es necesario que este sea enorme? ¿Maneja solo? No se trata de comprar un auto porque si, como que fuese un celular (los que a estas alturas son prácticamente desechables). Ya no existe el cariño o el cuidado por un auto y menos las ganas de arreglarlo. Son estas y muchas otras razones más, las que sumadas a la contaminación del transporte público e industrias nos tienen al borde de un punto de no retorno.

Hay muchas soluciones a este problema. Las más competentes y lógicas se encuentran en las nuevas costumbres que tomemos, en lugar de esperar a que una ley o la moda nos imponga para bien o mal lo que tenemos que hacer. Pero a veces cuando la desesperación nos gana, es cosa de que algún creativo e iluminado, le eche mano a su talento y viveza para crear una solución.

¿Se puede aspirar el Smog?

Es la pregunta del millón. Pero si le preguntas al holandés Daan Roosegaarde, te dirá que si se puede. Se le ocurrió, en conjunto con la compañía Environmental Nano Solutions y el científico Bob Ursem, crear un campo electroestático de alto voltaje, donde todas las partículas cercanas tomarían cargas positivas. Un dispositivo anclado a tierra, las atraería al suelo, donde finalmente se podría hacer desecho de estas.

El primer prototipo funciono de manera efectiva, en una maqueta montada al interior de una habitación de 25 metros cuadrados. El sistema a escala puede purificar hasta 28 mil metros cúbicos con menos energía que una ampolleta y con exposición a vientos de hasta 13 km/h. Pero todo indica que para remover el smog de Santiago (por ejemplo) México o Beijing, el prototipo tendría que crecer a un tamaño considerable y exponerse a variables más fuertes, lo que no lo hace viable por el momento.

Se rumorea que el proyecto ya tiene fecha de prueba en una plaza pública de Beijing. ¿Qué opinas de esto? ¿Le pones tus fichas a la aspiradora holandesa?

Lo leímos en The Verge.