[Test Drive] BMW X5 xDrive35i, elegancia alemana para dentro y fuera de la ciudad

Probamos el BMW X5 xDrive35i, el SUV con cara de todoterreno más grande de la marca germana y que por estos días ya vislumbra una nueva generación en el horizonte motor, el que se presenta como un elegante vehículo familiar de gran tamaño y excelentes prestaciones tanto dentro como fuera de la ciudad.

Exterior

El X5 es sin duda BMW por donde se le mire. Elegante, minimalista y de depurados detalles. Un alemán de tomo y lomo.

Al recorrerlo por su exterior destaca su imponente tamaño, con un alto frontal coronado por la doble parrilla característica de la marca que descansa sobre un parachoques delantero de con una gran abertura central que proporciona bastante agresividad al conjunto.

Sus neblineros ubicados en la zona más alta de la defensa frontal complementan el grupo
óptico que incorpora los característicos angel eyes de BMW, esta vez iluminados con LED blancos a diferencia de los anteriores que se presentaban en un tono más ámbar. Dichos focos delanteros se extienden hacia unos robustos tapabarros con pasos de rueda de generosas dimensiones que albergan sus llantas de 18 pulgadas.

En su parte lateral el BMW X5 se caracteriza por un borde esculpido que nace en el intermitente lateral y termina en el grupo óptico trasero pasando por la línea de las manillas de puertas laterales, las que se iluminan en la noche para ser identificadas con facilidad en la oscuridad.

El gran tamaño del X5 hace necesaria la incorporación de pisaderas laterales las que hace más cómodo el acceso y descenso de este SUV, las que por su cuidado diseño no hacen perder elegancia al conjunto.

En la parte trasera el borde esculpido lateral se presenta como la línea divisoria de los faros traseros que se presentan en forma de L y como el borde superior del espacio para la patente, donde también se ubica la cámara de retroceso.

Completa el conjunto trasero un parachoques con deflector de aire inferior que se presenta entre las salidas de escape cromadas.

Diseño equilibrado, sobrio y elegante sin parecer aburrido. Obtiene 9/10.

Interior

Subirnos al BMW X5 es ingresar a una atmósfera llena de elegancia y minimalismo. De un estilo más bien clásico se presenta de la manera en que BMW nos tiene acostumbrados, sin mayores “pirotecnias” en cuanto a sus instrumentos incorporando un escueto tablero con odómetro y tacómetro de esfera simple y sin profundidad lo que a ratos hace parecer un tanto carente de diseño si lo comparamos con otras marcas del segmento.

De una cuidada elección de materiales, el interior del X5 respira elegancia por todos sus rincones a través del cuero de sus asientos y las inserciones de madera en el panel frontal donde destaca una pantalla multifunción que incorpora datos del computador a bordo, radio, cámara de visión trasera y visión en 360 grados.

La consola central alberga la palanca de cambios para comandar la transmisión automática además del característico mando multifunción de BMW para manejar las opciones de radio y computador a bordo.

Es amplio, con muy buen espacio para las plazas traseras, las que pueden suprimirse para lograr una mayor capacidad de carga adicional a la de su gran porta maletas cuyo portalón se abre y cierra de manera eléctrica.

Lo hemos dicho en todos los BMW que hemos probado: Falta innovación y tomar algo de riesgos en el diseño interior. Le asignamos un 8/10.

Tren Motriz

El BMW X5 xDrive35i monta un motor TwinPower Turbo de 3.0 litros y 6 cilindros en línea capaz de generar una potencia de 302 caballos de fuerza, los que de verdad se sienten al pisar el acelerador a fondo.

Incorpora el sistema BMW EfficientDynamics, una gama de tecnologías que aumentan la eficiencia incorporadas a todo el vehículo. El turbocompresor con geometría de turbina ajustable, la electrónica del motor controlada en paralelo por varios procesadores y el sistema High Precision Injection que permite ahorrar combustible son algunas de las sofisticadas tecnologías presentes en el modelo.

El motor está asociado a una transmisión automática de 8 velocidades con Steptronic, sistema secuencial de cambio de marchas el que responde bastante bien a los requerimientos del conductor, enganchando hasta la marcha más baja posible en caso de que queramos acelerar a fondo aprovechando toda la potencia.

Contrario a lo que se pudiese pensar con todas las incorporaciones tecnológicas sólo aspira a un rendimiento máximo de 12 km/lt en carretera, el que baja considerablemente en ciudad logrando entre 7,6 y 5,7 km/lt de rendimiento, lo que promedia un consumo mixto entre 9,9 a 8 km/lt.

Cabe destacar que el BMW X5 xDrive35i no se encuentra registrado en el sitio Consumo Vehicular que debiese presentar las etiquetas de eficiencia energética de todos los vehículos homologados en Chile, por lo que no contamos con los datos homologados por un ente fiscalizador como la 3CV.

Se mueve increíble, pero presenta un elevado consumo de combustible. Sin embargo se plantea a un segmento donde este detalle no debiese ser un impedimento. Le damos 9/10.

Sensación de Manejo

Hay que decirlo, el BMW X5 xDrive35i es exquisito de manejar. Basta con sentarse al volante y pisar el acelerador a fondo para olvidar todos los prejuicios que se pueden tener al ver un automóvil de las dimensiones de este SUV. No por nada se hace llamar SAV (Sport Active Vehicle) en vez de SUV donde la U corresponde a Utility.

Quizás lo que más aporta a esta excelente sensación de manejo es la rápida respuesta del modo secuencial de su transmisión, pues no hay nada más aburrido que una transmisión que no responda a los requerimientos del conductor, lo que no sucede con este BMW X5.

Además los ángulos de visión y sus superficies vidriadas bien proporcionadas otorgan un buen dominio del entorno, lo que hace sentir al X5 como un vehículo absolutamente gobernable a pesar de su tamaño.

Por despertar emociones, se lleva un 10/10.

Maniobrabilidad

El BMW X5 a pesar de su gran tamaño es un vehículo bastante maniobrable. Cuenta con una dirección asistida electrónicamente

El sistema de tracción en las cuatro ruedas se adapta perfectamente a situaciones difíciles de la carretera. Gracias al sistema xDrive y al Control dinámico de estabilidad (DSC), el BMW X5 se mantiene estable y fiel a la trayectoria. El sistema xDrive reacciona inmediatamente en cuanto detecta una tendencia a sobrevirar o subvirar, basándose en el movimiento del volante y el giro de las ruedas.

Con la ayuda de un embrague controlado, transmite de manera flexible la fuerza motriz a los ejes del BMW X5 en una fracción de segundo para mantener la adherencia óptima a la superficie. De este modo, el sistema xDrive combina las ventajas de la tracción a las cuatro ruedas – motricidad, estabilidad de trayectoria y seguridad de conducción – con la agilidad típica del BMW X5.

Unos sensores de gran precisión detectan sin interrupción y prácticamente en tiempo real el estado actual del vehículo y optimizan cuando es necesario la estabilidad y la motricidad mediante intervenciones en la gestión del motor y los frenos.

Además, el BMW X5 dispone de un asistente de arranque, que evita durante 1,5 segundos que el vehículo se deslice hacia atrás en pendiente cuando se suelta el pedal del freno. Esto facilita el dominio del vehículo incluso en circunstancias adversas y aumenta activamente la seguridad, y con ello el placer de conducir.

Le damos un 10/10.

Seguridad

Además de los elementos obvios de seguridad de BMW como son los sistemas de control de tracción y los elementos pasivos como los airbags, sin duda unos de los elementos de seguridad que más se destaca es su sistema de cámaras que nos permite una visión trasera al retroceder o una vista en 360 grados para ver todo lo que hay alrededor de nuestro X5 a través de una cámaras montadas bajo los espejos retrovisores que simulan en la pantalla central una vista como si nos estuviesen mirando desde el cielo. Así tenemos plena referencia de todo lo que nos rodea al momento de estacionar.

Probablemente para muchos este sistema sea sólo un lujo y no un elemento activo de seguridad, pero cuando manejamos un vehículo de grandes proporciones, probablemente no veamos objetos pequeños alrededor de nuestro auto. Más importante aún si hablamos de niños o mascotas cerca de nuestro vehículo, por ello un sistema de cámaras y alertas sonoras como las que monta el BMW X5 xDrive35i se hace bastante útil.

El diseño de la carrocería también fue muy cuidado en cuanto a lo que seguridad respecta con una estructura rígida de deformación programada donde entre otros detalles destaca la fusión entre plásticos y metal del frontal y la separación interior entre parachoques y motor, lo que contribuye a una mejor absorción de impactos en caso de impacto frontal.

Cumple bastante bien. Se lleva un 9/10.

Terminaciones

En este ítem por lo general se caen los automóviles de origen asiático, pero con los alemanes nos vamos a la segura. Es un BMW, sinónimo de preocupación y cuidado por los detalles.

Desde la elección de materiales, la incorporación en su justa medida de cada uno, hasta las terminaciones de su instalación se nota el trabajo bien hecho.

No presenta ruidos molestos, no se siente incómodo en ninguna de sus plazas y tampoco se ven detalles dejados al azar. Simplemente 10/10.

Audio

Buen sonido. Es lo que siempre se busca en el sistema de audio de un automóvil de cierto segmento hacia arriba. No queremos que despierte a los vecinos de tres cuadras a la redonda, sino que suene bien y eso es lo que hace el sistema de audio del BMW X5 xDrive35i.

Si bien existe la opción de un sistema de audio de gama alta, la versión testeada monta el sistema standard, pero no por ello pobre en calidad.

Asociado a una pantalla TFT de 6,5 pulgadas a color, el sistema de audio ofrece toda la información necesaria para la sintonización de radio AM/FM, lectura de CD, MP3, DVD e incluso sintonizador de TV, el que solo funciona con el automóvil detenido por norma internacional de seguridad.

Suena bien, lee todo y es fácil de manejar. Le damos un 9/10.

Gadgets

Ya mencionamos la completa pantalla multifunción con más de un gadget disponible desde la comodidad del joystick dispuesto en la consola central en la que también se ubica un botón bastante particular, se trata del freno de mano automático, el que se hace bastante cómodo de utilizar en atochamientos, pues permite mantener al X5 frenado sin necesidad de mantener pisado el freno. Luego basta solo presionar el acelerador para que el freno deje de funcionar y continuemos la marcha.

Otro accesorio interesante es el ajuste eléctrico de asientos. Respaldo, ajuste lumbar y altura pueden ajustarse fácilmente a través de botones ubicados al costado del asiento de conductor y acompañante.

Además incorpora completos mandos al volante para controlar el sistema de sonido, control crucero y sistema manos libres para el teléfono, el que también es capaz de reproducir la música desde nuestro smartphone sin necesidad de cables.

Completo, con lo justo para el segmento. Obtiene 7/10.

Valor

El BMW X5 xDrive35i tiene un precio desde $29.900.000, lo que tomando en cuenta el prestigio de la marca, equipamiento y posicionamiento en el segmento lo hace tener una buena relación precio/valor de modelo.

Quizás el precio aún está muy cerca del límite en que el público objetivo aún está preocupado del rendimiento de combustible, lo que podría hacer que opte por algún modelo más económico. Por ello le damos 7/10.

• Exterior 9/10
• Interior 8/10
• Tren motriz 9/10
• Sensación de manejo 10/10
• Maniobrabilidad 10/10
• Seguridad 9/10
• Terminaciones 10/10
• Audio 9/10
• Gadgets 7/10
• Valor 7/10
• Total 88/100