Gigafactory.
La relación entre Tesla y Panasonic es lógica. La marca japonesa es la actual proveedora de las baterías cilíndricas que usa el Model S. Además tiene relaciones comerciales con varias otras marcas de autos, lo que permitiría que Tesla negocie con ellos la venta de bancos de baterías o baterías sueltas. El acuerdo también hace sentido para ambas partes: Panasonic dejará que Tesla se encargue del terreno, la construcción de la planta, mientras que Panasonic proveerá aquello en lo que tiene expertise: Maquinaria, equipamiento y herramientas para producir baterías cilíndricas de ion-litio.
Musk estimaba que la inversión requerida para montar la Gigafactory rondaba los 5 billones de dólares. Se estima que lo que gastará Panasonic en el proyecto estará cerca de los 2 billones, con Tesla asumiendo el resto de los gastos.
«La Gigafactory representa un cambio fundamental en la forma de producción de baterías a gran escala puede ser realizada. No solamente la Gigafactory permitir capacidad necesaria para el Model III pero establece la ruta de acceso para una reducción dramática en el coste de almacenamiento de energía en una amplia gama de aplicaciones.» indica JB Straubel, CTO y co-fundador de Tesla Motors.
Mientras la planta no esté lista, Tesla seguirá adquiriendo sus baterías a Panasonic, baterías producidas en plantas japonesas. Una vez que esté todo listo, la sociedad Tesla-Panasonic proveerá al menos a Tesla, ya que se espera que otras marcas se sumen a los clientes de esta Gigafactory.