Sin camuflaje: primeras imagenes del BMW i8 aparecen antes de Frankfurt

Después de 2 años, el i8 regresa a Frankfurt, en su forma final.

¿Y qué tal? BMW ha portado casi completamente el diseño conceptual del i8 al modelo de producción. Y si bien de BMW tiene bastante, al igual que el i3 no deja de ser un auto futurista, un conceptual de calle. Por fin un auto del futuro, para nuestros tiempos.

El i8 es parte de una serie de experimentos de BMW. Se supone que es una nueva línea de vehículos híbridos/eléctricos, encabezados por el i3, que viene a ser el hermano citycar y el i8 que es el coupé deportivo.

El interior toma elementos típicos de diseño de BMW, pero situados quizás 10 años a la vanguardia, donde los clásicos relojes dan paso a pantallas LCD, propiciando un ambiente completamente moderno, con predominio de tonos monocromáticos y detalles en color azul.

Te recordamos que el sofisticado tren motriz del i8 (no, probablemente este no se lo puedas llevar a tu mecánico de confianza) consiste en un motor tricilindrico turbo de 1.5 litros que desarrolla 228 caballos de fuerza y que va acoplado a una caja automática de 6 velocidades, enviando potencia al tren trasero. Todo normal hasta que agregamos un motor eléctrico de 129 caballos de fuerza que se encarga del tren delantero con una transmisión automática integrada de dos etapas.

Combinados, erogan 357 caballos de fuerza y 570 Nm de torque, cifras que avalan su aceleración de 0 a 100 km/h en menos de 4.5 segundos y su velocidad final de 250 km/h.