[Test Drive] Mazda CX-3 GT 2.0 AWD, capricho japonés

A principios de este año, arribó al país uno de los modelos más importantes de Mazda. Tan importante, que incluso llegó acompañado de su propio diseñador, Yoichi Matsuda, quien durante la presentación habló un poco de los principios del lenguaje KODO y de cómo este diseño evolucionará en los próximos modelos de la firma. Hablamos del CX-3, crossover compacto que se medirá con autos como el recién llegado Hyundai Creta, así como el Renault Captur, Peugeot 2008, Honda HR-V, Nissan Juke y Subaru XV, por mencionar. No, no es un nicho nuevo, pero es definitivamente el más popular. El CX-3 llega cargado de tecnología, diseño y detalles en materialidad, los que le entregan un valor agregado único pero… ¿Estará a la altura de las expectativas?

El diseño, claramente está a la altura de las expectativas. Muscular, atlético, fibroso y compacto. Hay definición en los pasos de ruedas, hay coherencia, aunque a veces la proporción entre su capot alargado y la cabina es un poco extraña para un auto de este tamaño. Los pasos de rueda con defensas plásticas ayudan a dar la impresión de cavidades más grandes, haciendo ver al CX-3 más alto; un buen truco visual. También llama la atención la silueta curvilínea que define la zona acristalada inferior y el efecto de techo flotante que se da al llegar a la zaga. Hay varios elementos que toman inspiración del Mazda2, como los ópticos y el portalón traseros, igual que la parrilla integrándose a los ópticos. En esta versión, la parrilla viene con franjas cromadas y las llantas son bicolor y de 18», ayudando al look.

El interior es una muestra de vanguardia que echábamos de menos en los autos japoneses. Mazda ha hecho un esfuerzo por ser la marca con mejor diseño de Japón y cada vez buscan superarse. Y si bien el interior es una herencia completa del Mazda2, no le quita absolutamente nada de estilo y materialidad. El confort es alto y la ergonomía muy pensada en el conductor, conjugando estas dos variables (estilo y facilidad de operación) de una excelente manera. En esta versión tenemos asientos de cuero, acentos de cuero en color burdeo, insertos en color aluminio y una excelente terminación.

Por el lado tecnológico, el Mazda CX3 presenta algunos interesantes elementos, como son su Head-Up display sobre el cluster de instrumentos y el sistema multimedia Mazda Connect con navegador y sistema de audio premium Bose con su clásico sello cálido de buenos bajos y medios. Ambas pantallas se ubican justo en la altura perfecta para no desviar la atención del camino y es algo en lo que Mazda ha hecho importantes esfuerzos.

Hay otros elementos pero que tienen que ver con lo mecánico, como el sistema de tracción on-demand inteligente que modula el par entregado según el deslizamiento o las pérdidas de agarre, así como el asistente de punto ciego y trafico cruzado. Todas las versiones de CX-3 llevan 6 Airbags, frenos ABS+EBD y Control de Tracción.

¿Es cómodo? Si y tiene cierta postura deportiva que se agradece. Eso si los asientos traseros solo son para dos adultos bajitos y nada más. El maletero es pequeño, con 230 litros de capacidad, más pequeño que el de autos como el Nissan Juke, Renault Duster y el Peugeot 2008. Más deportivo que utilitario. Y claro, por sus atributos deportivos, no es una «cuna».

En cuanto a su mecánica nos encontramos con un chasis muy deportivo, de manejo neutral, buen agarre y tacto, pero con un propulsor muy progresivo, que se siente flojo para las expectativas que Mazda nos hace de este auto. Es una unidad SKYACTIV de 2 litros, 148 caballos de fuerza y 192 Nm de torque desde las 2.800 RPM. Se mueve bien, pero no entusiasma. La caja automática de 6 velocidades cuenta con tecnología propia de Mazda, que opera con un embrague multiplaca entre el convertidor de par y la caja, para una sensación más directa, la cual solo se percibe con el modo manual. La caja cuenta también con un modo Sport que ayuda a levantar las RPM y a mejorar el comportamiento del auto, haciéndolo mucho mas vivaz, pero con cierta sensación de patinaje y también perjudicando el consumo. Vale destacar que la unidad SKYACTIV se ofrece en dos configuraciones de compresión, arribando al mercado americano la variante 13:1 que le permite usar combustible 93 octanos, pero con una baja en potencia y alza en consumo, lo que puede ser la razón de por qué le falta Zoom Zoom a nuestro CX-3.

El consumo de este auto estuvo cerca de los 11-12 km/l en ciudad y 16 km/l en carretera. Sabemos que es tracción integral, pero por su tamaño y tecnologías, claramente pudo ser mejor, incluso sabiendo que cuenta con sistema I-Stop.

El CX-3 es un crossover compacto caprichoso. Es un auto con el que es fácil engolosinarse, ya que no solo luce bien, se siente bien, tiene un equipamiento exquisito, muy buenos materiales, un nivel de construcción perfecto y un chassis muy neutral. Sin embargo no es una opción practica para ser un auto familiar por su poco tamaño y por su precio, en esta versión tope de linea al menos. Si tus únicas peticiones racionales, son que sea compacto y todo caminos, te robaras las miradas con el CX-3.

Datos Técnicos

Motor

• SKYACTIV-G 2.0 16v VVT DOHC, 4 cilindros (aspirado, inyección directa, compresion 13:1)
• 146 HP @ 6000 RPM
• 192 Nm @ 2800 RPM

Transmisión

• SKYACTIV DRIVE 6AT, con modo Sport y modo manual secuencial con selectores al volante

Tracción

• Integral (i-ACTIV AWD) con acople de torque dual activo

Rendimiento de Combustible

• Ciudad (Observado): 11-12 km/l
• Ciudad (3CV): 12,4 km/l
• Carretera (Observado): 16 km/l
• Carretera (3CV): 17,8 km/l
• Mixto (3CV): 15,3 km/l

Precio

• CX-3 GT 2.0 AWD 6AT I-STOP GPS: $17.690.000

Puntuación Racing5

• Por Fuera: 18/20
• Por Dentro: 18/20
• Tren motriz: 14/20
• Al Volante: 16/20
• Valor: 16/20
• Total: 82/100

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