Listo para tomarse el protagonismo del stand de Audi en el próximo Salón de Ginebra, ha sido estrenado el nuevo Audi TT. La tercera generación del coupé biplaza de la marca de los cuatro anillos llega muy renovada, pero manteniendo algunas de sus líneas más clásicas, particularmente en el diseño de su parte trasera. La parte delantera ha sido completamente renovada y tiene un aspecto más agresivo, dominado por líneas horizontales inspiradas en el Audi Sport Quattro Concept presentado el año pasado. La parte de atrás, ve a la redondez tomar el control y así a las líneas clásicas del Audi TT desde su primera generación en 1998.
Hay tres motores disponibles incluyendo uno para la versión deportiva TTS. La primera opción se trata de una unidad 2,0 litros diesel TDI de cuatro cilindros con una potencia de 184 HP y un torque de 379 Nm. Lo impresionante es la economía de este motor TDI que es capaz de lograr 23 kilómetros por litro en ciclo combinado, una verdadera proeza para un auto deportivo. Alcanza los 100 kilómetros por hora en 7,2 segundos, lo que no está nada mal. Los otros dos motores son variaciones de la misma unidad 2,0 litros turbocargada TFSI, una con una potencia de 230 HP y la otra con 310 HP. La versión TTS se lleva además 379 Nm de torque contra 368 Nm de la versión sin modificaciones. El motor 2,0 TFSI puede ir combinado con una caja mecánica de 6 velocidades con tracción trasera o una versión all-wheel drive Quattro con caja automática de doble embrague de seis velocidades. El TTS alcanza los 100 kilómetros por hora en 4,7 segundos, en tanto que la versión TT turbo lo hace en 6 segundos con la caja manual y 5,3 segundos con la caja S-Tronic.
Bienvenido, Audi TT.
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