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Es lo que pensó un grupo de ingenieros rusos que ante la problemática de la utilización de sistemas de navegación GPS para motociclistas decidió emprender en el desarrollo de un casco que incorpore la tecnología de la realidad aumentada para hacer de casco, visera y GPS un solo cuerpo.
Mediante un microprocesador se proyecta una imagen sobre la visera para entregar las indicaciones de navegación en tiempo real sobre la visión del piloto, así no tiene que despegar la vista del camino. Solo basta con que el conductor le hable a sus casco para que éste despliegue la información. Si, lo más parecido al casco de Ironman.
Ya se encuentra en la fase de desarrollo y se espera que esté disponible en el mercado para el 2014 a un valor aproximado de US$2000.