Mini Drift: El pequeño rey del asfalto

Cada día al otro lado del mundo un japonés hace algo que en occidente nos impresiona y hace que salga de nuestra boca la clásica frase «estos locos japoneses». Esta vez la sorpresa no llega de manos de un japonés intentando reventar un globo con un WRX, sino de un pequeño niño que promete ser […]

Cada día al otro lado del mundo un japonés hace algo que en occidente nos impresiona y hace que salga de nuestra boca la clásica frase «estos locos japoneses».

Esta vez la sorpresa no llega de manos de un japonés intentando reventar un globo con un WRX, sino de un pequeño niño que promete ser el Drift King del vecindario en la modalidad, autitos eléctricos.

Todo un playboy japonés si tomamos en cuenta su deportivo rojo descapotable y la import girl que lleva a su lado.

“Soy un amante de los autos casi por genética y con el tiempo he aprendido de mis amigos mecánicos a desenvolverme humildemente en el mundo de los fierros. En los autos encuentro el relajo y tranquilidad que a veces se pierde con la rutina del día a día”.