[Pornografía Tuerca] La fabricación del último Bugatti Veyron

El Veyron marcó el regreso de Bugatti al mundo automotriz, tras el poco conocido EB110 de principio de los ’90. Bugatti siempre fue una marca de mucho lujo y extravagancia. Podríamos decir que se encuentra entre lo que ofrece un Rolls-Royce y lo que podría desarrollar Koenigsegg o Pagani. Y claro, usando los nutridos bolsillos del grupo Volkswagen, todo es posible.

Así nació el 16.4. Tracción a las cuatro ruedas Haldex, un motor de 16 cilindros en W de 8 litros, 10 radiadores y 4 turbos, aerodinámica activa, todo eso le permitía una velocidad tope final de cerca de 400 km/h. Con una potencia de casi 1000 caballos de fuerza, uff…

Ya han pasado 10 años y el Veyron sigue siendo una máquina de vanguardia, digna en cada centímetro de ser un Bugatti. Pero como todo lo bueno tiene un final, el Veyron debe morir, para dar espacio a un nuevo modelo de Bugatti. En este video se retrata la construcción del último de los Veyron Grand Sport Vitesse, la unidad final, antes de los aplausos, las rosas y las cortinas. Una de las piezas de ingeniería más radicales que el ser humano ha visto.