En Mercedes-Benz hay una larga historia con respecto a las nomenclaturas que llevan los modelos. Como todos sabemos, las líneas se dividen en «Clases» donde según la letra, es el segmento que ataca. Hasta ahí todo bien. Sin embargo, con la llegada de los coupé o de los SUV, esto ha ido mutando bastante, al punto en que a veces era difícil saber que auto corresponde a cual segmento.
Para tu horror, si te los estabas aprendiendo aun, te contamos que hay cambios… importantes. Te hacemos un punteo con todas las modificaciones:
- La línea principal se mantiene, con la Clase A como segmento de entrada, Clase B como modelo monovolumen familiar y los tres segmentos de sedanes, Clase C, Clase E y Clase S.
- Desde ahora, todos los todoterrenos, sean crossovers o SUV, llevaran la denominación GL, heredada del Clase G. Por lo mismo el GLA será el crossover de entrada, similar al Clase A y el GLK pasará a ser GLC para mostrar su similitud con el Clase C. Los cambios más radicales vienen arriba donde el popular ML ahora se llamara GLE y el GL, GLS.
- Por el lado de los sedanes deportivos (o coupé de cuatro puertas) el CLA y el CLS se mantienen en el orden correlativo con sus semejantes en la línea de sedanes.
- El SLK ahora se llamará SLC, y el SL seguirá siendo el tope de línea entre los roadster.
En resumen, mucho más claro y con un esquema más fácil de asociar, donde las primeras letras hablan del tipo de auto y la última, asociada al segmento y posicionamiento.
